sábado, 28 de julio de 2018

Paul Belmart: "La fiesta de tres días es un paso muy importante para Caspe"

Si tuviéramos que elegir entre todos los asistentes a La Noche In-Xtremis Summer Festival a la persona que más ama la música sin duda sería él: Abel Martín Poblador, conocido artísticamente como PAUL BELMART. Una persona que no deja de sorprendernos y de crecer como artista porque siempre está en constante aprendizaje, desde escuchar a músicos alternativos hasta aprender a tocar nuevos instrumentos. De hecho, desde Peña In-Xtremis damos fe de que ahora está progresando mucho con el ukelele.

Pero lo más importante es que para Abel, aquello que empezó siendo un trabajo, se ha terminado convirtiendo en un hobby, y para nosotros es más que un placer que un amante de la música como él sea partícipe de un evento como este. Y es que la música puede con todo, de hecho, nuestro entrevistado de hoy nos recuerda que, como diría Bono (U2): "la música puede cambiar el mundo, porque puede cambiar a las personas".



Hola Abel, bienvenido a La Noche In-Xtremis Summer Festival. Debutaste en la fiesta en 2011, ya ha llovido mucho desde entonces pero queremos conocer como empezaste, así que cuéntanos sobre tus inicios...

Paul Belmart (P.B): "Toco el piano desde los ocho años y eso ha hecho que desde siempre haya estado muy vinculado al mundo de la música. Durante la carrera, me propuse trabajar como DJ para poder ganar algo de dinero extra y desde entonces no he parado. Es un trabajo que me ha permitido conocer gente interesante y además me he podido divertir muchísimo."


¿Porqué tu nombre artístico es Paul Belmart?

P.B: "Belmart es una amalgama de Abel y Martín (mi nombre). Paul Belmart tiene las mismas sílabas que Poblador (mi apellido), además de que fonéticamente ambas empiezan de la misma forma." 


¿Con qué estilo de música te sientes más cómodo? ¿Te inspiras en alguien especialmente?

P.B: "Siempre me he sentido por el House instrumental, no tanto por la música vocal. Intento evitar sonidos demasiado sintéticos o artificiales y me gusta apostar por instrumentos acústicos sobre una base electrónica. No tengo ninguna referencia clara en cuanto a inspiración. Aunque parezca difícil de entender, todos los artistas de cualquier género son capaces de aportar algo positivo. El secreto está en comprender qué nos quieren transmitir con su música y adaptarlo a las sesiones en directo."


¿Puedes adelantarnos algo de lo que va a ser tu paso por el festival?

P.B: "Haré de todo. Tengo preparadas bastantes canciones de Deep House para crear un ambiente muy Chill en la terraza, pero la mayor diferencia respecto a otros años es que por primera vez voy a llevar al directo mi sintetizador para crear sonidos de piano sobre bases House. Eso sí, para ello cuento con la inestimable ayuda de Carlos Vidal a los platos."


¿Qué te parece el nuevo formato de fiesta de tres días, y que se toquen más estilos musicales?

P.B: "Es un paso muy importante, no solo para In-Xtremis, sino para todas las peñas y asociaciones de Caspe. Abre una puerta a una forma de trabajo en la que los organizadores no dependen de ayuntamientos u otros organismos para llegar al pueblo. Eso es bonito, es creado por y para la gente de Caspe. El hecho de incorporar más estilos permite llegar a más personas y por tanto engrandece el evento."


¿Qué esperas de La Noche In-Xtremis Summer Festival 2018?¿Qué nos va a sorprender?

P.B: "Espero lo mismo que he esperado todos estos años: un buen ambiente de verano, cervezas frías, una organización estupenda y amigos que vienen con ganas de divertirse y pasar un buen rato juntos. Creo que puede sorprender el giro que da la propia fiesta en cuanto a duración y estilos de música. Estoy seguro de que la gente lo va a disfrutar."


¿Cuál es la mejor anécdota que te haya ocurrido a lo largo de tu carrera en tus actuaciones?

P.B: "Lo comentaba ayer mismo con otro amigo DJ. Una noche fui a pincha a un pueblo para sus fiestas y no se si fue porque los altavoces estaban muy altos, porque la gente armaba mucho ruido, o a causa de una vecina maruja que no podía dormir (la realidad fue la suma de las tres opciones), conseguimos que se presentara la guardia civil y cerrara la fiesta. Por aquel entonces había mucha presión mediática con la SGAE y decidieron que era una buena idea para pedirnos documentación que acreditara que era música legal. No os podéis imaginar la cara que pusieron cuando empezamos a sacar, una a una, las facturas de la compra de la música en Beatport. Fue como... ¡Ostia que la llevan!. Inmediatamente se marcharon de allí con cara de póker y terminó la fiesta. En cierto modo me vino bien porque aun me dio tiempo a dormir un par de horas antes de empezar a trabajar al día siguiente."

No hay comentarios:

Publicar un comentario