miércoles, 13 de mayo de 2020

Historia de un fracaso

La Peña In-Xtremis llevaba toda la década de los 2010 destacando en el Fútbol Playa organizado por Peña La Oficina. Pero en 2015 se produjo el mayor traspiés de la historia de las participaciones de la peña en este torneo.

Estamos acostumbrados a contar grandes hazañas de este equipo, y no es para menos, ya que sus números lo elevan hasta la cumbre de cuantos ha habido en el torneo pero no todo han sido éxitos. Hoy os contamos la historia del mayor fracaso de In-Xtremis en el fútbol playa.

Llegaba el verano de 2015 y la moral de In-Xtremis estaba por las nubes. No era para menos, el año anterior habían logrado ganar el tercer título en tan solo 5 años, y con otras dos finales perdidas. Para más inri, en 2013 habían conseguido llegar con los dos equipos de la peña hasta semifinales, quedándose a las puertas de una final In-Xtremis. Se volvió a intentar en 2014 pero el destino quiso que los dos equipos de la peña se cruzasen en los Cuartos de Final, donde el ganador acabó levantando la copa de campeones.

Así que para 2015, una vez conseguido el triplete, se perseguía otro objetivo: la ansiada final entre In-Xtremis Classic e In-Xtremis Select. Para ello, se decidió probar un experimento, y ya se conoce el dicho de ... ¿Para qué cambiar algo que funciona muy bien? Bueno, pero la motivación estaba tan alta que se decidió experimentar.

La cuestión estaba en mezclar a los dos equipos, cosa que nunca antes se había hecho, para tratar de tener dos equipos muy compensados que llegasen y se enfrentasen en una hipotética final. Pero si los dos equipos funcionaban era porque jugaban de memoria, y además, ambos equipos tenían estilos de juego muy diferentes.

Ya vimos el mes pasado como fue la eliminación de uno de los dos equipos, el que formaban Miki, Héctor, Buisán, Villoro y Mario, quienes quedaron eliminados por tan solo un gol y, a decir verdad, no se podía considerar al proyecto un fracaso por culpa de la mala suerte.


Pero la derrota más sonada fue la que protagonizó el otro equipo, que tenía bajo palos a todo un porterazo como Santi Bordonaba, al máximo goleador histórico del fútbol playa, Simón, y además estaba completado por Gavín, Rubén y Óscar.

En las tres primeras jornadas de la liguilla el equipo fue capaz de mantener su portería a cero (¡excelente!), pero el problema es que no fueron capaces de marcar gol alguno. Esto les había llevado a obtener tres empates a cero que significaron 2 victorias en penaltis y una derrota en la fatídica tanda. Teniendo en cuenta que en caso de empate a puntos se cuentan los goles marcados, el equipo dependía de sí mismo para quedar clasificados en cualquiera de las 5 posibles de su grupo. Sí, sí, como lo oyen.

El destino había querido que In-Xtremis (4º en ese momento) se enfrentase a Dklicio (5º y último en ese momento, y sin posibilidades de pasar) en el último partido de grupos, y conociendo todas las posibilidades que tenían. Éstas eran:

- Si In-Xtremis perdía, les adelantaba Dklicio y quedarían últimos de su grupo.

- Si In-Xtremis ganaba marcando uno o dos goles se mantendrían en la cuarta posición de su grupo.

- Si In-Xtremis ganaba marcando tres goles conseguirían ascender una posición terminado terceros.

- Si In-Xtremis ganaba marcando cuatro o cinco goles quedarían en segunda posición, suficiente para ir a una repesca de segundos clasificados de otros grupos, pero que debido al pobre bagaje del grupo no les daría para clasificarse.

- De modo que la única opción de clasificarse pasaba por ganar marcando al menos 6 goles con lo que terminarían primeros de su grupo.


Marcar seis goles en un partido de 10 minutos es algo muy complicado, pero no imposible. In-Xtremis había ganado 6-1 a Kodizia en 2009, y en varias ocasiones habían logrado ganar marcando 5 goles. Además, en Cuartos de Final del 2010 In-Xtremis marcó 4 goles en tan solo 3 minutos frente a Dekxis. Pero todo eso era parte del pasado y ahora había que demostrar la eficacia goleadora que venía acompañando al equipo en el último lustro.

Durante los 5 primeros minutos del partido el equipo salió en tromba pero se topó con un gran Santi Balaguer (portero de Dklicio) que estuvo inexpugnable. Las críticas desde la grada por parte de otros miembros de In-Xtremis eran palpables, a la vez que merecidas, pero la esperanza es lo último que se pierde. 

Simón batió al portero pero la pelota se quedó parada en la línea de gol.

El barco se hundió por completo cuando en los minutos finales se erigió la figura de Edu Ros para quitarle el protagonismo a su portero marcando dos goles completamente idénticos, uno de ellos en el descuento.

Con este partido se puso fin a un desastroso experimento de In-Xtremis en el fútbol playa donde este equipo del que hemos hablado, no solo no pasó de grupos, sino que se quedó último de su grupo, y que no fue capaz de meter un solo gol en los cuatro partidos de la liguilla. 

Os dejamos el enlace al partido completo del "hundimiento":